Desde Meridiano Play, nos sumamos a la campaña Pirotecnia Cero impulsada por el municipio de General Villegas y diversas instituciones.
La campaña está enfocada en niños, especialmente aquellos que sufren de hipersensibilidad, como lo es en los casos de niños con Trastorno del Espectro Autista.
El Trastorno del Espectro Autista (TEA) tiene entre sus síntomas la hipersensibilidad en sus sentidos, especialmente la auditiva. Por eso, las personas con autismo son muy sensibles a los estímulos externos, ya sean imágenes, olores o sonidos, y por lo tanto la pirotecnia los afecta directamente.
Según los especialistas, las personas con TEA tienen una mayor sensibilidad en algunos de los sentidos, y en particular el oído. Al tener su capacidad auditiva incrementada, perciben los estruendos como una verdadera catástrofe, se estresan y sufren. Algunos se tapan los oídos de manera desesperada, pero sin poder controlar las crisis que les provocan los ruidos, pueden llegar a autolesionarse.
En los animales, el uso de pirotecnia genera taquicardia, temblores, falta de aire, náuseas, aturdimiento, pérdida de control, miedo y/o muerte. Los efectos en los animales son diversos y de diferente intensidad y gravedad. Los perros suelen sentir temor y al huir pueden ser víctimas de accidentes o perderse. Las aves reaccionan frente a los estruendos con taquicardias que pueden provocarles la muerte; los gatos suelen correr detrás de los explosivos por simple curiosidad pudiendo ingerirlos, perder la vista o lesionarse; los insectos y otros animales pequeños poco pueden hacer para no ser dañados, la pirotecnia es para ellos un explosivo de gran tamaño.
La campaña está enfocada en niños, especialmente aquellos que sufren de hipersensibilidad, como lo es en los casos de niños con Trastorno del Espectro Autista.
Esta tradicional manera de festejar perjudica no sólo a personas, sino también a animales.
Que el festejo sea para todos...
#PirotecniaCero